¡Hola a todos! Os doy la bienvenida a mi primera entrada en el blog de Didáctica de la lengua española.
INTRODUCCIÓN
El lenguaje es la base de todos los conocimientos; se trata
de una actividad humana compleja que asegura dos funciones básicas: la de
comunicación y la de representación. Sin utilizarlo y comprenderlo
correctamente es imposible tratar ningún contenido educativo.
A través de la expresión lingüística, los niños transmitirán
sus sentimientos, vivencias, ideas y opiniones. Además, la práctica de la
expresión en los procesos que la educación ha de impulsar, contribuye a generar
reflexiones, a centrar la atención sobre un tema, a organizar la estructura del
mismo, a darle forma de acuerdo con criterios de adecuación, coherencia y
corrección y a hacer todo ello con un estilo que sea manifestación de algo
propio que se desea compartir.
Contar con una buena competencia en lengua oral supone
dominar todas y cada una de las habilidades verbales y no verbales que
intervienen en cualquier proceso de expresión.
La escuela, como ensayo de la vida social, debe propiciar
situaciones de expresión oral, individual o grupal, dar pautas concretas sobre
buenos y malos usos, aportar ideas e indicaciones para mejorar y utilizar
diversas estrategias que permitan a los estudiantes entrenar y mejorar su
expresión oral.
Con la mejora de la expresión oral se pretende que los
alumnos comuniquen a los demás de forma adecuada no solamente contenidos, sino
también emociones y pensamientos.
La comprensión oral apenas se trabaja en el aula. Los niños
oyen, pero nadie les enseña a escuchar. Aprenden a guardar el turno de palabra
cuando aún son demasiado pequeños para llevar a cabo una conversación no
egocéntrica. Más tarde olvidan, incluso, este aprendizaje.
Los niños escucharán con más atención las aportaciones de
sus compañeros sobre temas cercanos que sobre contenidos académicos.
En el trabajo de este primer bloque, crearé una situación de
diálogo en gran grupo, en la que tenemos alumnos que participan mucho y sin
respetar las normas, y otros alumnos que no participan en los diálogos orales. En
esta actividad se evaluarán las intervenciones de los estudiantes, además de su
expresión oral y su comunicación oral.
El tema que he escogido es “los estereotipos y los roles de
género.”
He decidido trabajar este tema con alumnos de 5º curso. A
pesar de que se puede educar fuera de los estereotipos y los roles de género
desde edades tempranas, a esta edad los niños son más conscientes del entorno que
les rodea. Además, es un tema que está muy presente en la sociedad y permite la
participación de todos los alumnos, ya que han visto o escuchado sobre ello. El
objetivo del diálogo principalmente es que los alumnos intercambien opiniones.
CONTEXTO
Antes de comenzar el diálogo, la profesora establecerá unas normas para que el diálogo entre los alumnos sea correcto, entre todos realizarán un cartel con las normas de respeto.
Estas ocho normas básicas son suficientes para que la
actividad transcurra con orden, dando la oportunidad de que todos participen.
La profesora actuará como moderadora e intervendrá cuando sea necesario para
poner orden, para dar los turnos de palabra o para hacer preguntas para
reactivar el diálogo.
La actividad se llevará a cabo en el aula, los alumnos
estarán sentados en círculo para poder verse cuando hablen y para que sea más fácil la
comunicación entre todos.
El tema a dialogar se introducirá, primero a través de una
serie de preguntas que la profesora planteará a los alumnos, con el objetivo de
observar que conocimientos tienen sobre el tema. Las preguntas pueden ser: “¿Sabéis
que son los estereotipos?” o ¿Qué entendéis por roles de género?”
A continuación, la profesora les pondrá un vídeo donde se expliquen aspectos a tener en cuenta sobre el tema, por ejemplo, la diferencia entre sexo y género o el significado de estereotipo. El objetivo, es que puedan asociar lo que se comenta en el vídeo con experiencias que hayan vivido o visto.
Este es el enlace al vídeo, la profesora lo pondrá únicamente
hasta el minuto 2:32. https://www.youtube.com/watch?v=d36phzZib90
Cuando los niños hayan visto el vídeo, se les harán una serie de preguntas relacionadas con él y con la realidad de su vida.
- ¿Quién realiza el mayor número de tareas en casa?
- ¿Creéis que las tareas realizadas en casa las puede llevar cualquier miembro de la familia?
- ¿Creéis que los niños y niñas pueden jugar con los mismos juguetes?
- ¿El deporte se le da mejor a las chicas o a los chicos?
- ¿El color rosa es para chicas?
- ¿Por qué creéis que hay un mayor número de mujeres trabajando como profesoras?
- ¿Conocéis o habéis escuchado alguna frase donde se perciba algún estereotipo?
- ¿Creéis que las princesas de Disney fomentan los estereotipos y los roles de género?
Durante el diálogo y antes de introducir algunas preguntas
se podrán mostrar imágenes de juguetes, profesiones o películas para que los
niños puedan opinar mientras responden las preguntas. La profesora dará el
turno de palabra a los alumnos que levanten la mano, fijándose también en
quiénes participan más o menos y teniéndolo en cuenta tanto para la evaluación
como para diálogos futuros.
Al finalizar el diálogo, la profesora realizará junto a los
alumnos una conclusión con las ideas principales que han obtenido y sobre cómo solucionar
el problema de los estereotipos y roles de género.
¿CÓMO HACER PARTICIPAR A UN NIÑO QUE NO LO HACE?
En cuanto al niño que no participa en clase, no hay que
obligarle a participar en el diálogo si no quiere, es imprescindible crear un
ambiente favorable para que ese niño se sienta cómodo y no tenga miedo a participar.
Es importante animar y apoyar a ese niño, haciendo hincapié cuando participe en que su
aportación ha sido muy correcta, dándole pie a que aporte otra
idea.
Al principio del diálogo podemos sugerir a los alumnos que
por parejas comenten ideas tras ver el vídeo, para que así este alumno se
sienta respaldado por un compañero y no tenga miedo a equivocarse.
¿CÓMO ACTUAR CON EL NIÑO QUE MOLESTA CONTINUAMENTE, QUE NO
RESPETA LAS NORMAS DE LA COMUNICACIÓN Y QUE SOLO ACEPTA SU POSTURA?
En el caso de este alumno, habrá que recordarle antes de
iniciar el diálogo que debe respetar las normas de respeto, y que tiene que
escuchar a sus compañeros porque a él también le gusta que le escuchen cuando
habla.
Si durante el desarrollo del diálogo continúa interrumpiendo
el moderador le llamará la atención y le recordaremos que debe de pedir permiso
para hablar.
Si tras esta llamada de atención comienza a respetar las normas, se le reforzará positivamente, haciéndole ver que lo ha hecho muy
bien cambiando su actitud. Cuando haya que evaluar al alumno también se
podrá tener en cuenta su evolución durante la actividad.
EVALUACIÓN DE LA ACTIVIDAD CON LOS NIÑOS
Después de terminar el diálogo, los alumnos rellenarán una hoja de autoevaluación que les servirá para ver cuáles son sus puntos débiles y qué creen que deben mejorar de cara a la próxima actividad.
La profesora también rellenará una rúbrica para evaluar la
expresión oral de los alumnos.
Para concluir, creo que esta actividad ayuda a conseguir la
competencia lingüística de los alumnos. Con este tipo de actividades podemos
fomentar la participación de los alumnos, haciendo que sean clases dinámicas en
las que los niños se sientan motivados con temas de diálogo/debate que les
interesen.
Estas actividades son muy positivas para que aprendan a escuchar a sus compañeros y para que la protagonista no sea la profesora, que sean los alumnos quienes aporten sus ideas y opiniones. Es necesario crear un ambiente de respeto y confianza, donde todos los alumnos se sientan cómodos para participar al saber que van a ser respetados.
BIBLIOGRAFÍA
Teoría Didáctica de la lengua española
Guía de trabajo Didáctica de la lengua española
Hola Elena,
ResponderEliminarme parece muy interesante el tema que has elegido para el diálogo en gran grupo. Creo que es muy importante enseñar a los alumnos/as que en esta vida no hay nada de chicos o de chicas, que cada uno debe sentirse libre para elegir lo que le guste o prefiera sin pensar en las etiquetas que nos pone la sociedad. Tal vez las preguntas que has elegido para introducir el tema les cueste contestarlas en un primer momento ya que por lo general son conceptos difíciles de definir, a lo mejor podrías reformularlas de esta manera ¿creéis que los hombres deben comportarse de una manera y las mujeres de otra?; sin embargo, el vídeo que has elegido para tratar el tema me parece muy claro y fácil de entender. Por otro lado, me ha parecido muy buena idea que durante el diálogo utilices imágenes para ayudarles a entender las preguntas, de esa forma les resultará más fácil organizar sus ideas para después exponerlas al resto de la clase. Con respecto a cómo harías para hacer participar al niño que no lo hace, me ha gustado que antes de exponer en gran grupo lo que piensan, primero dialoguen por parejas para que el alumno en cuestión se sienta respaldado por un compañero y no tenga miedo a equivocarse. Por último, me ha gustado mucho la hoja de autoevaluación que has creado para que los niños reflexionen sobre sus logros y sobre sus puntos débiles para que puedan mejorar en su aprendizaje.
Muchas gracias por tu comentario, tienes razón acerca de las preguntas que he planteado a los niños, lo tendré en cuenta para mejorarlo.
EliminarBien, Marta.
EliminarMe gusta mucho tu entrada, Elena. Solo tengo que hacerte un par de sugerencias para que la mejores.
ResponderEliminarEn relación con las preguntas que vas a usar para dinamizar el diálogo, te comento:
"¿Quién realiza el mayor número de tareas en casa?" Esta pregunta es buena, pero no para un diálogo sino para introducirlo y "calentar motores". No es una pregunta buena para dialogar porque cada niño dará su respuesta y nadie debería opinar sobre cómo se organiza la familia de otros.
El resto pueden servir para un diálogo siempre y cuando te asegures de que de que cada respuesta que se dé, sea comentada, debatida, completada... entre todo el grupo hasta que se agote, antes de pasar a una idea nueva. Lo más importante es que no sea: yo pienso que sí por esto, yo pienso que no por aquello... sino que se escuchen y se respondan unos a otros y eso les obligue a reflexionar sobre sus propias argumentaciones y sobre las de los demás. Deja claro en tu actividad cómo vas a hacerlo porque puede parecer una pequeñez, pero es lo que diferencia un tipo de acto comunicativo egocéntrico de otro social.
El niño que no participa, tiene que hacerlo. Puede no hacerlo en un diálogo, pero no puede no hablar en clase porque el desarrollo de la expresión oral es un contenido curricular. Si el contexto es como se plantea en la asignatura, no hay opción a que tenga miedo y, en un diálogo en el que opinamos (no damos cuenta de lo que sabemos), no hay posibilidad de equivocarse. Dale una vuelta a cómo integrar a este niño.